jueves, marzo 03, 2011

Día gris, neblinoso, apagado.


No están tus palabras que 
aunque no sacien, me dan un pequeño aliento.
Te tengo sed. 
Te guste o no.

Soy una lagartija de sangre fría que 
sólo se templa tumbada ante ti.
Me siento muy pequeña y emborronada.
Como un dibujo hecho a boli y tachado con saña.

Directa a la papelera.

Es el día, monocromo y frío, apagado.
O son tus palabras que no llegan
y yo, tu marioneta, 
no puedo ser si tú no me mueves.

2 comentarios:

Vanessa Alanís dijo...

me gustó eso de "te tengo sed"

elescaramujo dijo...

poema muy bien construido. actitud desafiante en ese ser que tiene sentido en la interacción con el otro. besos!

KulturArt