domingo, abril 08, 2007

Para siempre

He mirado esta mañana el mar,
desde la distancia de mi habitación,
dormía entre nubes,
mecido por la tormenta que ha pasado,
y no quería brillar para mí.

He creído ver estrellas rezagadas
que no querían marcharse aún,
pero sólo eran mis pestañas aún dormidas.

Pensaba en mis pies blanquitos
que parecían querer marcharse
lejos de mi cuerpo,
y no eran más que mis ganas de caminar.

No creía querer despertarme
pero no hay forma de manterme en la cama
cuando no tengo con que soñar.

Si no hay nada en qué pensar,
no hay nada que pueda hacer,
nada que cantar, que tararear...

y aún así sonrío, con mis dientes bailarines,
sin prisas,
al fin y al cabo, la vida pasa,
pero baila conmigo.

Nada que hacer, que decir,
que esperar...
y mientras escribo este vacío,
hecho de cuentas de cristal...

He creído ver mis manos manchadas de pintura,
y no era más que un juego de sombras,
que se escapaba de mi alcance,
como si fuera arena...

arena que se va.

KulturArt