Hay nombres hermosos y Octubre es uno de ellos. No siempre me lo pareció así, pero supongo que aquello que envuelve a Octubre lo hace especial.
Octubre y Otoño, una hermosa pareja, se va apagando la luz paulatínamente, como si destiñeran los días, y el ocre se hace rey con coronas de hojas y ramas desnudas. Empiezan a sonrojarse las mejillas por el frío, y la húmedad de una lluvía fina traen nuevas fragancias.
Es el mes del olvido. Se va borrando todo aquello que pueda recordar al verano, que pueda recordar el año que ya coletea. Octubre es abrigo, paraguas y gripe.
1 comentario:
Sombreros. Vuelan los sombreros, por este aire arremolinado que trae la lluvia. Lluvia de nubes plomizas, cansadas, antiguas. Lluvia que no puede quitar la sed de una tierra excesivamente seca.Lucha, lucha con ramas y hojas para tratar de aprehender alguna gota. Gota a gotita, la felicidad.
Algunos van con paraguas. Entre sombras. Juego de luces. Grises.
Chapotear en los charcos, calando los canales hasta llegar a los huesos.. intentando beber un poco de otoño, un poco de limpieza, después de todo ya se acaba el año. Ya se nace de nuevo. otra vez. Otra.
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