domingo, abril 20, 2014

Impasse

¿Cómo ha sido?
De pronto
todas las canciones hablan de ti.

Los silencios acumulan amapolas,
mientras mis pies desnudos
juegan con la arena.

Tibio desencuentro
enredando a los pájaros,
hambrientos, de mi cabeza.

Torpe tropiezo
que me ahoga en primavera.

La luz, los colores, la brisa...
dibujo garabatos en el aire,
difíciles ecuaciones que no puedo resolver.

Mi flequillo revolucionario
a penas esconde mis volteretas mentales.

¿Cómo ha sido?
De pronto
mi piel ceniza se ha vuelto roja.

Las adelfas asfixian los sueños,
se oyen olas rompiendo en la costa
y el levante humedece los labios.

Tonto juego de naipes
que se quiebra con el peso de los días.

Quedará una ciudad desierta
con el eco de tu nombre
y mis cuentos, repletos de sombras.

Extraña luz,
que no puedo aprehender.
Cristales que caen
en un bosque de tinta.

Hoy te escribo
como si pudieras verme,
de verdad,
como si quisieras leerme.

Acabaré bailando con las moscas
y guardándolo todo en un tarro,
pintando de amarillo los insectos e
imaginando que son luciérnagas.

Pequeño universo de gente pequeña.

¿Cómo ha pasado?
De pronto
todo lo que escribo habla de ti.

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jueves, abril 17, 2014

Yo te he visto.- dijo una zombie

Duele la primavera,
tanto color germinando desde dentro.
Las sombras agonizan
en gritos que huelen a sal.

Se hunden mis pasos
pequeños y torpes
dibujando castillos efímeros.

Duele tanto sol,
mientras lo escondo bajo mis ojos.
Oscuras esferas inertes
que miran y sueñan.

En silencio,
diminuta partícula
que intenta sobrevivir al viento.

Poca cosa que decir,
me sobran dedos si me pongo a contar.

Y las palabras se amotinan,
dejándome sorda.

Pierdo el equilibrio
golpeando un pie contra el otro,
caigo de bruces
derrumbándome con elegante transparencia.

Polvo, ceniza y polen.

Duele mi piel sensible,
mi blanca nada
que se derrite en un insoportable vacío.
Locura que sabe a miel y limón.

¿No lo oyes?

Mis células tiritan,
diminutas,
estirando sus manos.

Un entramado de mi complicado absurdo.

No llego a alcanzar los bordillos,
perdiéndome en este laberinto
repleto de muñecas perfectas
y manzanas rojas.

Duele esta brisa deliciosa,
con tantas flores atacando.
Desconsiderada primavera.

Y escondo las ganas,
y guardo las manos,
y desdibujo los sueños.

Yo te he visto.

Tan callado.
Escondido entre el silencio
y tus ojos oscuros.

Duelen tus momentos claros,
tan alejados de mi tonta fragilidad.
Duele la voz que te guardas,
tan cerca de mis brazos fríos.

No hay posibilidad
en este tiempo tan desconsiderado
que no espera.

Crece descontrolada la imposibilidad
entre mi cuerpo inerte de zombie
Y tu cuerpo que huye.
Una de terror.

Coso viñetas a este cómic,
dibujando interrogantes
juntando tus medias palabras
y flúor, y amapolas, y neón.

Duele esta primavera
que ataca a mi sangre indefensa.
Se me escapan las sonrisas
liberando mis dientes desordenados.

Fabulosas historias para los dos,
guardadas dentro,
perdiendo la oportunidad.

¿No lo ves?

El suelo se mueve bajo mis pies.

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