Que llueva no es lo importante,
ni siquiera si ya pasó enero...
los gritos van ahogándose,
como si fueran días
que tiritan y tiritan
en este invierno tan templado…
queda poco para marzo
y sus frutos o lágrimas.
Sigo contando los días,
Sumando dedos
Restando silencios
En este tejido imposible
Lleno de ceros
que ya no tienen sentido.
No duele que llueva o llore,
Ni siquiera que ya no hable,
Ni mire por los cristales buscando…
Sólo estamos mi sombra y yo
Mirándonos
En este vacío difícil
Que no se diluye cuando llueve
Que hayan gritos ya no es importante
Ni siquiera si cierro la puerta
e intento correr, correr, correr…
¿Qué pasó con el viento?
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