martes, agosto 30, 2005

A ver quien canta Bingo!

La mayoría de las personas con el estilo disléxico de aprender exhibirán por
lo menos 10 de los comportamientos de la siguiente lista: -sigue en comentarios-

sábado, agosto 27, 2005

Trocitos del Recuerdo [vol.1]

Madrid

Mis primeros recuerdos son pequeños, imágenes de ciertos momentos, no tienen continuidad, aunque en realidad creo que así son todos, siempre sólo se recuerda un fragmento del tiempo. Los más antiguos son bajitos, como vistos con la cabeza gacha, aunque más bien son de aquel tamaño que tenía entonces. La imagen que me viene a la mente como comparación es la introducción a “Alf”, como en esa serie solo aparecen piernas, partes bajas de las puertas, suelos, escalones, nunca veo el techo, o las lámparas, o las mesas desde arriba…
Tengo bastantes recuerdos de esa época, en Villalba, algunos me ha costado situarlos mucho tiempo.
Tengo memoria las puertas de madera oscura, el carrito dorado de la tele, las camas hacinadas, la cuna de mi hermano, el cuarto de baño, el rellano, la escaleras, la puerta de Camino, la casa de Arancha y sus juguetes, el porche. Pero todas estas imágenes forman una maraña de recuerdos, a veces enredados. Voy a escribirlos todos, por si algún día los olvido, tenerlos guardados y saber que fueron míos.

viernes, agosto 26, 2005

El Muelle

Conozco un muelle viejo.
Muy lejos, como en sueños.
De madera húmeda salada,
que me mira cansado,
como quien ya ha visto todo.
Conozco un muelle viejo,
que vive eterno en mis ojos,
donde se oyen aún los pasos
que dimos aquellas noches.
Las estrellas, tus pupilas,
el tequila y el deseo.
Eramos niños arrullados
por la marea
en la enorme cuna de madera
de mi muelle viejo.
Y si cierro fuerte los párpados
me abrazas y te abrazo,
en la enorme caracola,
con el frio rodeándonos,
en este muelle viejo,
tu vetusto tesoro,
mi mejor sueño.

Errores

Vuelves a caer una y otra vez en el mismo error, como si fueras el eje de un ovillo de lana. Demasiado abrigo para este agosto asfixiante. Otra vez, Otra Vez, Siempre...
Precipitarse al infierno vacío que dibujo en mi mente, a esta nada de ceros y agujeros que forman este collar tedioso que hunde mis pies en la arena. Cadena.

Mediterráneo

Quizá porque mi niñez
sigue jugando en tu playa,
y escondido tras las cañas
duerme mi primer amor,
llevo tu luz y tu olor
por donde quiera que vaya,
y amontonado en tu arena
guardo amor, juegos y penas.
Yo,
que en la piel tengo el sabor
amargo del llanto eterno,
que han vertido en ti cien pueblos
de Algeciras a Estambul,
para que pintes de azul
sus largas noches de invierno.
A fuerza de desventuras,
tu alma es profunda y oscura.
A tus atardeceres rojos
se acostumbraron mis ojos
como el recodo al camino...
Soy cantor, soy embustero,
me gusta el juego y el vino,
Tengo alma de marinero...
¿Qué le voy a hacer, si yo
nací en el MEDITERRÁNEO?
Nací en el MEDITERRÁNEO...
Y te acercas, y te vas
después de besar mi aldea.
Jugando con la marea
te vas, pensando en volver.
Eres como una mujer
perfumadita de brea
que se añora y que se quiere
que se conoce y se teme.
Ay...
si un día para mi mal
viene a buscarme la parca.
Empujad al mar mi barca
con un levante otoñal
y dejad que el temporal
desguace sus alas blancas.
Y a mí enterradme sin duelo
entre la playa y el cielo...
En la ladera de un monte,
más alto que el horizonte.
Quiero tener buena vista.
Mi cuerpo será camino,
le daré verde a los pinos
y amarillo a la genista...
Cerca del mar. Porque yo
nací en el MEDITERRÁNEO...
Nací en el MEDITERRÁNEO...
Nací en el MEDITERRÁNEO...

martes, agosto 23, 2005

cosas que pierdo

La mediocridad golpea fuerte. Es como una soga pesada y húmeda, que voy arrastrando, dejando huella, acumulando escombros. Y al mismo tiempo camino sobre ella, como en una cuerda floja, con vértigo, vértigo a la altura, miedo, miedo a caer al suelo. ¡Cómo duele!

lunes, agosto 22, 2005

Se acaba el verano

Hay algunos silencios dificiles.
Como la soledad que crece entre el vacio,
como lo hacen las telarañas,
y los desiertos de polvo.
También como mirarse detenidamente en el espejo.
Temblar.
Temblar y titubear ante una mañana soleada,
con tus manos pequeñas que no hacen sombra.
Hay muchos silencios rodeandonos.
Como si fuese el cauce de un torrente,
¿tal vez hoy sea el día en que inunde?.
Secos.

viernes, agosto 19, 2005

GILDA

Put the blame on mame


When they had the earthquake -
in San Francisco-back in 1906
They said that old mother nature -
was up to her old tricks.
That's the story that went around,
but here's the real lowdown-
Put the blame on mame boys,
put the blame on mame
One night she started to - shim and shake-
that brought on the `Frisco quake
So you can, Put the blame on mame boys,
put the blame on mame.
They once had a shootin' -
up in the Klondike when they got Dan McGrew
Folks were puttin' the blame on -
the lady known as Lew
that's the story that went around,
but here's the real lowdown-
Put the blame on mame boys,
put the blame on mame
Mame did a dance called the Hichy-koo,
that's the thing that slew McGrew
So you can, Put the blame on mame boys
PUT-THE-BLAME-ON-MAME

Todos deberíamos tener infancia.

Luego habrá tiempo de conocer el dolor, el sufrimiento, el miedo. Para eso siempre hay un momento, pero para la infancia no. A veces se escapa queriendo llegar demasiado rápido, y la dejamos ir, la tiramos por la borda, y nos perdemos, irremediablemente, en el fondo de algún viejo cajón, tiritando.

jueves, agosto 18, 2005

Put The Blame On Me, Boy

Pretendía ir a descansar temprano, pero he acabado viendo Gilda. No la había visto nunca, y aunque no me ha sucedido como con "Matar a un ruiseñor", he de reconocer que adoro el cine clásico.

Lo cierto es que Prometo, Pandora, y todas las cerillas, de momento deben estar en otra galaxia. Quien sabe, a lo mejor un día de estos escribo algo. <-- ¡he dicho "a lo mejor"?!

Absurdas paranoias de nerviosismos de reloj. Emborracha la soledad.

miércoles, agosto 17, 2005

¡¡Salta el polvorín!!

Agosto. Calor y pólvora. Ya empezaba a invadirme el sueño, con ese sabor dulzón a baba y náusea dulzona, trago agridulce, y de pronto, como si todos los piratas de la historia atacasen mi puerto, prende el polvorín. Traca, cohetes, castillo y fiesta. Lástima que la brisa sea tan débil y no se entremezcle con el aroma a sal del Mediterráneo. Tengo que conformarme con el peso que tiene mi piel bajo este resplandor cansado de sudor sin salitre.
Brilla, colores y formas, sonido chispeante y eclosionador, sigue el castillo mientras escribo, lento golpeteo interminente, una forma, luego otra, y la calle parpadea, iluminándose, manchándose de luz.
Ahora se anima, va llegando a su final, poco a poco acelerándose, más formas, más luz. Ruido.
Último golpeteo, como un quejido. Y aplausos.

Me encanta que me aplaudan por el mero hecho de irme a dormir.

martes, agosto 16, 2005

Una habitación con vistas

Agosto. Noche pegajosa, vapor que sale de todos lados. Creo que las paredes exhaustas de tanto calor sudan las arrugas de la pared. Tengo las pestañas pegadas a la enorme ventana. Enorme, enorme e insuficiente ventana. La mosquitera me mira con malos ojos, como si el exterior fuera una habitación que me contempla. Animal enjaulado. Animal.
No hay mucho movimiento entre mis axones, al menos nada que merezca un leve fulgir en alguna cerilla. Aquí esta, toda la cajita repleta de cabezonas, quietecitas, como sardinas en lata. Buenas noches.

KulturArt